Previos de micro

HISTORIA DEL PREVIO Y USOS EN LA ACTUALIDAD

Un previo, preamplificador de micrófono o preamp es un dispositivo cuya misión principal es aumentar el voltaje de la señal recogida por un micrófono hasta alcanzar el nivel de línea (1,23V) para poder trabajar con ella y procesarla. Dicho de un modo más sencillo, un previo permite dar ganancia a un micrófono.

Siempre que se conecta un micrófono, ya sea para grabar con él o simplemente para amplificar el sonido de una fuente sonora (como por ejemplo en un concierto), disponer de un previo es una condición indispensable.

Los primeros previos que existieron eran aparatos a válvulas. Algunos se ubicaban en el interior de las mesas de mezclas, los previos internos, y otros se conectaban a una entrada de línea de estas, los previos externos. A pesar de ser muy valorados por su sonido más cálido (explicado por la generación de armónicos pares), los preamps valvulares fueron sustituidos por los de transistores, ya que su sonido era muy aceptable y sus poco frecuentes averías eran mucho menos costosas de reparar. La mayoría de estos previos, aunque se encontrasen de forma externa, incluían también una pequeña sección de ecualización. En algunas ocasiones, incluso controles de dinámica.

Lo que sucede hoy en día, es que la gran mayoría de los aparatos de sonido destinados a grabar o a ser utilizados en directo, incluyen internamente sus propios previos. Tanto las mesas de mezclas como las tarjetas de sonido o interfaces más económicas cuentan con ellos. Es más, se podría generalizar y, salvo en ciertas excepciones, decir que los preamps actuales que se encuentran de serie en los aparatos de audio son bastante más cristalinos y fieles que los de antaño (por supuesto, dentro de la gran variedad de preamplificadores de nuestra era, no debemos olvidar que hay distintos rangos de calidades, lo cuál resulta bastante evidente escuchando unos y otros). Entonces, ¿por qué ese gran interés por los previos de válvulas o de transistores antiguos? ¿Por qué son tan valorados a día de hoy con los grandes avances tecnológicos que se han alcanzado?

Pues bien, los antiguos preamps, capturaban con menor fidelidad el sonido de los micrófonos. Esto radicaba en una notable coloración, compresión e incluso saturación de la señal. Es decir, una modificación bastante considerable de la misma. Sin embargo, esta pérdida de la nitidez y de la naturalidad inicial del sonido emitido por la fuente, añadía cierto carácter al audio, siendo mucho más agradable y encajando mejor en un entorno de mezcla. Por supuesto, los parámetros para conseguirlo se pueden manipular de forma más sutil, como por ejemplo a la hora de grabar una voz en una canción de jazz, o más agresiva, como en el caso querer procesar la voz de un cantante de hard rock. Cuanto mayor volumen de entrada, input level o gain (dependiendo de cada previo) se aplique, más se sobrecargarán los transformadores del mismo, lo que resultará en un mayor grano o saturación en el sonido procesado.

Generalmente, los preamplificadores que colorean la señal destacan a la hora de grabar voces, ya que suelen ser el elemento principal de una canción. Es decir, aquel en el que todo oyente fija su atención. Sin embargo, su utilización es muy importante en cualquier fuente que sea captada a través de un micrófono, ya que, gracias a ellos, es posible conseguir una intención sonora y un tono anterior a la mezcla y a cualquier otro procesado del sonido. Por ejemplo, en los micrófonos aéreos u overheads de la batería, es muy común aplicar un gran nivel de ganancia para que suenen ligeramente saturados. Por supuesto, siempre que se quiera sobrecargar el transformador del preamp aplicando un volumen de entrada superior al necesario para simplemente elevar el nivel del micrófono al nivel de línea, es fundamental compensarlo reduciendo el volumen de salida u output level para que del previo salga una señal con un nivel adecuado.

Pese a la relación lógica entre micrófono-previo, los límites de la experimentación en este ámbito son inexistentes. Un claro ejemplo de ello es el sonido de la guitarra de John Lennon en la canción Revolution. Según cuenta en sus memorias Geoff Emerick, su ingeniero de grabación, Lennon quería un sonido de guitarra tan distorsionado que no era capaz de lograrlo con su propio amplificador de guitarra ni saturando el previo del micro con el que estaba siendo grabado. Finalmente, Emerick decidió conectar directamente la guitarra a la entrada de micrófono de la mesa y saturarla al máximo con el preamp de esta, consiguiendo un sonido similar al de un pedal de fuzz. Otro ejemplo de guitarra directa a previo está en la canción Black Dog, de Led Zeppelin.

Como ya se comentó en referencia a los previos antiguos o vintage, su precio suele ser desorbitado. Aunque es cierto que muchos de ellos han sido relanzados al mercado copiando la circuitería de la época, siguen estando al alcance de muy pocos bolsillos. Por eso mismo, gran cantidad de compañías de audio se han decidido a sacar sus propios preamps en formato plugin. El problema más común, sin entrar a evaluar la calidad del sonido de cada marca, es la latencia. Es decir, el retardo que se genera entre la señal de entrada y la de salida, lo cuál dificulta en gran medida el trabajo al intérprete. Sin embargo, Universal Audio, incorpora un sistema de latencia Zero junto a su tecnología Unison. Esto significa que, a la hora de grabar, el retardo que generan estos módulos (u otros efectos que se quieran añadir) roza los 0 ms, evitando molestias para el músico. Además, la tecnología de modelado de preamplificador Unison convierte los previos de altísima calidad de la Apollo, la interface de Universal Audio, en una réplica de un amplio catálogo de preamps disponibles, copiando su electrónica y su respuesta ante la señal. Dicho de otro modo, Universal Audio pone al alcance de cualquiera el sonido los previos que han escrito la historia de la música moderna a través de una sola interface.

Algunos de ellos son los siguientes:

SSL 4000 E CHANNEL STRIP:

Desde que apareció en 1979, esta consola trajo al mundo el sonido moderno, estando presente en más discos Platino que ninguna otra. Su sonido crudo y con garra sumado a su increíble sección de dinámica han hecho de la SSL 4000E un verdadero estándar de las grabaciones modernas.

Algunos artistas que han sonado gracias a este channel strip son: Red Hot Chili Peppers, Prince, Beyoncé, Tupac, Kendrick Lamar…

NEVE 1084:

Este es el corazón de unas mesas de la serie Neve 80 bastante raras de encontrar y muy codiciadas. Su preamplificador de clase A ofrece la claridad y el carácter típicos de Neve, mientras que su colorida paleta de opciones de ecualización lo lleva varios pasos más allá del famoso 1073.

Hablando del 1084 nos estamos refiriendo a un clásico del sonido británico de los años 70, ideal no solo en voces, sino también para exprimir al máximo guitarras, baterías, sintetizadores y todo lo que se le ponga por delante. Un músico cuyo sonido ha esta estado ligado a este previo en múltiples ocasiones es Jeff Beck.

NEVE 1084:

HELIOS TYPE 69 PREAMP:

La consola con el previo Helios Type 69 fue el centro de cientas de grabaciones de álbumes pertencientes a la conocida como “Era Dorada” del rock. Desde álbumes imprescindibles de Led Zeppelin, The Beatles, Jimi Hendrix y Pink Floyd, hasta Bob Marley and the Wailers, David Bowie, Black Sabbath y AC/DC, el Type 69 aporta grosor, una actitud inconfundible junto a un midrange con garra y un gruñido autoritario.

- UNIVERSAL AUDIO 610 TUBE PREAMP:
El previo 610-A original fue partícipe en infinidad de grabaciones legendarias, como el álbum Pet Sounds de los Beach Boys o el Folsom Prison, de Johnny Cash. En su variante más moderna, el 610-B, este preamp ha contribuido a crear nuevos clásicos a través de Adele o Color War Kids.
Ideal para añadir un color valvular con calidez y cuerpo a voces, guitarras y bajos. Otros artistas que fueron grabados con este previo, en concreto con la mítica consola “Green Board” de Wally Helder fueron Neil Young, Ray Charles, Elvis Presley y Jimi Hendrix.